martes, enero 27, 2009

La perra, la gata y el amnésico


La perra y la gata solían ser amigas. Solían salir a caminar juntas por el parque cuando alguna de las dos tenía alguna necesidad que compartir. Solían ser amigas del amnésico. Solían también salir con él; la gata por la luz, y la perra por la sombra. Los tres solían vivir una vida un poco holgada, sin que esto implique que ésta sea cómoda.

El amnésico salía con la gata cuando la perra vivía en otro mundo, muy cerca del de ellos. La perra salía con la gata cuando el amnésico no tenía interés alguno por la gata, mucho menos por la perra, pues ahora él estaba en otro mundo. El amnésico y la perra salían juntos cuando éste no recordaba que alguna vez salio con la gata, ni que ellas salían a caminar a los parques buscando suplir sus necesidades. Sus vidas eran vaivenes de la suerte que, se podría decir, tenía el amnésico, pues aunque la gata siempre estaba con el amnésico, la perra también estaba por ahí, sin que esto implique que estaban los tres juntos en realidad. 

Millones de minutos pasaron, y después de muchos vaivenes, el amnésico volvió a salir con la gata, sin recordar que alguna vez salió con la perra, ni que las perras son perras por antonomasia. La perra, que todo lo recuerda y necesita de la gata para suplir sus necesidades, decide sacar de la sombra su historia con el amnésico, contándole a la gata, pues ahora ella pasa demasiado tiempo con el amnésico y eso no le gusta a la perra. La gata no cree aquella historia y le encara la situación al amnésico, esperando alguna reacción de él; pero, él no atesora recuerdo alguno de la perra y no tiene historia que contar, por lo que se toma como válida la versión de la perra, que le sonríe al amnésico con la victoria entre las manos. El amnésico se quedó sin perra ni gata.

Todo esto ocurrió ayer. Hoy el amnésico no sabe a quién buscará, pues no recuerda nada de lo ocurrido ayer. Él sabe que aún sale con alguna de las dos; pero, no tiene idea con cual. Quizá las encuentre caminando en el parque, supliendo alguna necesidad, o planeando como matarlo...

1 comentario:

Juan Carlos Namoc Leturia dijo...

:p el uso de la tercera persona te delata como el amnésico